Una multitud de “participativos” y “entusiastas” 736v32
¿Los que van a las marchas son conscientes del circo para el que se prestan? Por supuesto que lo son, pero se conforman con sobrevivir fingiéndose “participativos”. 4p183p
¿Los que van a las marchas son conscientes del circo para el que se prestan? Por supuesto que lo son, pero se conforman con sobrevivir fingiéndose “participativos”. 4p183p
“Pan con olor a cucarachas”, denuncian vecinos de Delicias tras el uso de harina almacenada en mal estado que debió ser destinada a desecho
LA HABANA, Cuba. – La galopante inflación que se manifiesta en la economía cubana, especialmente en los productos agropecuarios, es un fenómeno que, al parecer,
“Dieta para niños de calabaza”: así escribieron los empleados de un agromercado en La Habana.
Cuba es un país atrapado en las garras de un régimen represivo, y cuando uno entiende ese “detalle”, entonces comienza a encontrarle sentido a todo cuanto parece que no lo tiene.
Del país que fue Cuba ya queda poco: el recuerdo en algunos, los menos.
Las acciones perpetradas por el régimen de La Habana este 29 de abril vuelven a demostrar su vocación represiva e inmovilista.
Pagaremos con apagones porque ese es el “precio topado” de desfilar, de hacerles el juego.
Los custodios eran seis pero debieron huir, pues, los ladrones les dispararon, y no con tirapiedras, sino con armas de fuego.
En cuanto a la suspensión de la venta de gas de balita (“hasta nuevo aviso” según los medios oficiales), esta supone un problema casi insalvable para las innumerables familias cubanas.
¿Los que van a las marchas son conscientes del circo para el que se prestan? Por supuesto que lo son, pero se conforman con sobrevivir fingiéndose “participativos”.
“Pan con olor a cucarachas”, denuncian vecinos de Delicias tras el uso de harina almacenada en mal estado que debió ser destinada a desecho
LA HABANA, Cuba. – La galopante inflación que se manifiesta en la economía cubana, especialmente en los productos agropecuarios, es un fenómeno que, al parecer,
“Dieta para niños de calabaza”: así escribieron los empleados de un agromercado en La Habana.
Cuba es un país atrapado en las garras de un régimen represivo, y cuando uno entiende ese “detalle”, entonces comienza a encontrarle sentido a todo cuanto parece que no lo tiene.
Del país que fue Cuba ya queda poco: el recuerdo en algunos, los menos.
Las acciones perpetradas por el régimen de La Habana este 29 de abril vuelven a demostrar su vocación represiva e inmovilista.
Pagaremos con apagones porque ese es el “precio topado” de desfilar, de hacerles el juego.
Los custodios eran seis pero debieron huir, pues, los ladrones les dispararon, y no con tirapiedras, sino con armas de fuego.
En cuanto a la suspensión de la venta de gas de balita (“hasta nuevo aviso” según los medios oficiales), esta supone un problema casi insalvable para las innumerables familias cubanas.