Mis derechos primero
Tania Díaz Castro, Grupo de Trabajo Decoro
LA HABANA, abril - Lo que más debe interesar a los cubanos es que se respeten sus derechos. Unos saben lo que representa y otros no. Pero para contrarrestar la acusación de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas contra el gobierno de Cuba, nuestros
dirigentes políticos se refieren a la OTAN, si fue falso o no el informe que decidió la agresión a Kosovo, los muertos de Yugoslavia, los problemas de la población serbia, el bloqueo contra Irak, el nacimiento de los niños con malformaciones en países
bombardeados y el hambre en países subdesarrollados.
Algo así como el que para aliviar sus culpas, menciona sólo las ajenas. Ahora resulta que debemos tener en cuenta, para juzgar la situación de los derechos humanos en Cuba, las dos guerras mundiales que se desarrollaron en gran medida en Europa, a la OTAN o los países
que la componen como fabricantes y portadores de armas o dueños de los principales medios de comunicación y promotores de la globalización.
En fin, cualquier problema de mi planeta no me es ajeno, puesto que me siento ciudadana del mismo. Pero, ¿cómo intentar remediar los males del mundo si no somos capaces de crear una sociedad verdaderamente libre en nuestro país, hacer que se respeten todos nuestros
derechos, contemplados en la Declaración Universal de la ONU y prohibidos y omitidos en la Constitución cubana, gracias a la influencia de filosofías extranjeras?
Primero, limpio el piso de mi casa. La pongo en orden. Luego, me preocupo de mi acera y de mi calle. Sí, en el mundo reina la injusticia y la avaricia, pero la que debo resolver primero es la injusticia y la avaricia de poder que existe en mi país.
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