Publicado el 30 de agosto de 2001 en el
El Nuevo Herald
Un preso político denuncia abusos físicos
Néstor Rodríguez sufrió una golpiza a manos de la
policía política
EFE
El preso político cubano Néstor Rodríguez Lobaina,
quien cumple una condena de seis años en una cárcel de Guantánamo,
denunció ante varios organismos internacionales que fue víctima de
una "violenta agresión'' perpetrada por la Policía Política
de Cuba.
La organización Directorio Revolucionario Democrático Cubano,
con sede en Miami, informó que Yunaibis Castillo Betancourt, esposa del
prisionero político, leyó por teléfono una carta enviada a
varios organismos internacionales.
Rodríguez Lobaina, de 35 años, es el presidente del Movimiento
Cubano de Jóvenes por la Democracia, grupo de oposición que busca
la autonomía universitaria desde 1991, y quien fue acusado de "desacato
a la figura del comandante en jefe Fidel Castro'', así como de "desorden
público''.
El disidente cursó una misiva sobre su situación a Amnistía
Internacional, que lo ha declarado prisionero de conciencia; a las Comisiones de
Derechos Humanos de la ONU y del Parlamento Europeo y a los cuerpos diplomáticos
acreditados en Cuba, entre otros organismos e instituciones.
"En estos momentos me urge la necesidad de dirigirme a los referidos
organismos internacionales y a los hombres honestos y de buena voluntad en el
mundo civilizado para denunciar y de paso solicitar un SOS en defensa de mi
integridad física'', señala la misiva.
Explicó que está ingresado en la sala para reclusos del
hospital General de Guantánamo con "fracturas bilaterales en la mandíbula
como resultado de una violenta agresión de la que fui víctima por
elementos reclutados al estilo paramilitar que utilizan los cuerpos represivos
de la Policía Política''.
Según Rodríguez Lobaina, esa es una estrategia del organismo
policial para "crear terror psicológico y amedrentar la moral de
prisioneros políticos que sufren injustas condenas de cárcel por
el régimen comunista y fundamentalista de la isla''.
"Pido que intercedan ante el gobierno cubano para que se respete mi
integridad física y se ponga fin a la política de terror y
vandalismo encubierto de las autoridades cubanas contra sus opositores políticos
y pacíficos'', dijo el preso político.
Resaltó que su "único delito es ejercer el legítimo
derecho de reunión, asociación, manifestación y de libertad
de expresión. Todos de forma no violenta. Durante once años he
sido sometido a un amplio campo de torturas físicas y psicológicas
por parte del Departamento de Seguridad del Estado'', agregó.
La esposa del prisionero informó que Rodríguez Lobaina cumple
condena en la prisión Combinado de Guantánamo y pese a su condición
de salud, que requiere su permanencia en el hospital, la policía quiere
trasladarlo a la enfermería de la cárcel.
Todo esto "sin contar con la situación crítica en la que
se encuentra, con ligas que le atan la mandíbula y pudiendo solamente
alimentarse con líquidos'', afirmó Castillo Betancourt.
Reciben a Castro con salmón en Brasil
Harold Olmos / Ap. Rio De Janeiro
Camino de Africa, el gobernante cubano Fidel Castro arribó ayer a
Brasil para pasar la noche en una lujosa suite presidencial con vista a la playa
de Copacabana. El menú consistía de salmón con ensalada.
Castro, quien hace poco festejó sus 75 años en Venezuela, fue
recibido en el sector militar del aeropuerto El Galeao por el gobernador Anthony
Garotinho. Se dirigió inmediatamente al Othon Palace hotel y la suite del
piso 28 sobre la playa de Copacabana.
Un centenar de partidarios vocingleros lo recibieron con carteles que
rezaban "Viva Fidel y la revolución cubana''.
Cuando ingresó en el hotel vistiendo su tradicional uniforme verde
olivo, se produjeron algunos empujones entre los que pugnaban por verlo.
También hubo forcejeos entre los guardaespaldas de Castro y los
periodistas locales.
Un guardaespalda tomó por el cuello al fotógrafo de la AP
Renzo Gospodi y le dio un puñetazo en el estómago.
El cocinero del hotel, Mario Tavares, dijo que le pidieron que preparara
salmón, ensalada y maíz para el huésped cubano, el mismo
plato que comió en su visita anterior. |