El País. España,
abril 20, 2001.
Las divergencias en la UE evitan la condena del embargo a Cuba
Castro pierde apoyos en América Latina
Peru Egurbide | Madrid.
Las divergencias prácticas entre los siete países de
la Unión Europea representados en la Comisión de Derechos Humanos
de la ONU evitaron que el embargo de EE UU contra Cuba fuera condenado en la
votación celebrada en Ginebra en la noche del pasado miércoles,
que aprobó una resolución mucho más próxima a las
tesis de Washington que a las de los Quince. El voto de condena de la situación
humanitaria bajo el régimen de Fidel Castro puso en evidencia que éste
pierde apoyos en América Latina.
La Comisión de Derechos Humanos de la ONU aprobó en la noche
del miércoles una resolución que reprueba la situación en
Cuba -la décima de las adoptadas en el mismo sentido a lo largo de los últimos
once años-, pero que no menciona el embargo decretado por Estados Unidos
contra la isla.
Los quince países de la UE mantienen la posición común
de que la reprobación humanitaria del régimen de Castro debe ir
acompañada de una condena paralela del embargo, porque sus efectos
negativos para la población refuerzan al régimen. Sin embargo,
como ocurre con frecuencia, esta cohesión teórica de los Quince se
diluyó a la hora de negociar el texto concreto de la resolución.
Países como Alemania, Holanda o Dinamarca se alinearon claramente con
EE UU en la defensa de una propuesta que Francia amenazó con no apoyar,
rompiendo por primera vez en este foro la unidad europea. España, que
como Bélgica o Italia criticaban el proyecto, no se planteó en
ningún momento secundar la amenaza sa, según indican fuentes
diplomáticas, ni competir con otras sugerencias en un protagonismo
internacional sobre el problema cubano que la política exterior del
actual Gobierno de José María Aznar trata claramente de evitar.
La propuesta polémica incluía una mención vaga y
confusa de la 'necesidad' de que el pueblo cubano 'fortalezca sus derechos
humanos y bienestar económico'. Había sido negociada por la República
Checa, que habitualmente expresa en esta votación la posición
europea, y EE UU, que rechaza desde hace años que la condena del embargo
se añada a esta resolución. Un simple cambio de esta frase por
otra que afirma que se 'deberían adoptar medidas para mejorar la condición
económica del pueblo cubano' hizo, sin embargo, que Francia se diera por
satisfecha y volviera al voto europeo unitario de apoyo a la resolución,
aún itiendo que lo aprobado queda muy lejos del objetivo inicial de
condenar el embargo. Por lo demás, la condena a Cuba se impuso por dos
votos -22 frente a 20 y 10 abstenciones-, uno menos que el año pasado, y
evidenció que Castro sigue perdiendo apoyos en América Latina: sólo
la Venezuela de Hugo Chávez le secundó en el rechazo de la
resolución. Perú, que en 2000 votó en contra, se abstuvo.
Costa Rica, que el año pasado se abstuvo, votó la condena.
Argentina repitió su voto de castigo, como Guatemala, y repitieron la
abstención Brasil, México, Colombia y Ecuador.
"Falaz, injusto, cínico"
Mauricio Vicent | La Habana. Viernes, 20 de abril de 2001
La reacción cubana a la resolución de condena contra la isla
en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU fue la que se esperaba:
rechazo total al documento, por considerarlo "falaz", "injusto"
y "cínico". Según el canciller cubano, Felipe Pérez
Roque, lo sucedido el miércoles en Ginebra fue una "victoria pírrica"
de Estados Unidos pues, dijo, pese a la "furibunda campaña de presión
e intimidación" que desató Washington sobre las delegaciones
del tercer mundo, la cual incluyó llamadas personales del presidente
norteamericano George W. Bush a varios presidentes de América Latina, sólo
pudo conseguir la aprobación del documento por una exigua minoría
( 22 votos a favor, 20 en contra y 10 abstenciones).
"No aceptamos ni una sola letra de esa resolución", dijo
Roque, quien siguió en directo la votación junto a todos los
funcionarios del ministerio de Relaciones Exteriores en la sede de la cancillería.
Durante el acto, Pérez Roque denunció las "presiones
intolerables" de Estados Unidos para lograr que se aprobara la resolución,
presentada por la República Checa, con la que, aseguró, se quiere
justificar el embargo económico que mantiene desde hace décadas
sobre la isla. "Como no pueden contra Cuba en otros terrenos, intentan
utilizar el de los derechos humanos para condenar a Cuba y justificar la política
de bloqueo y guerra económica genocida contra nuestro país",
afirmó Pérez Roque.
"Falacias"
La Habana denunció como "falacias" de Estados Unidos la
condena de la Comisión de Derechos Humanos defendió con pasión
la "democracia real" que existe en la isla. "Cuba está más
orgullosa que nunca de su obra en favor de los derechos humanos, de nuestro
pueblo y millones de personas en todo el mundo, de los derechos políticos
y sociales. Nos sentimos orgullosos de la democracia real que cuenta de verdad
con el pueblo para conducir los destinos del país", añadió.
Para el canciller cubano lo ocurrido en Ginebra no fue una derrota de Cuba,
sino todo lo contrario: "Celebramos en este momento con toda la alegría
y el orgullo que cabe en el pecho una nueva victoria moral de la Revolución
cubana, un nuevo mentís a las acusaciones y las falacias del imperio que
intenta nuevamente colonizar nuestro país", dijo.
Ayer, coincidiendo con la celebración del 40º aniversario de la
derrota de las fuerzas invasoras de Bahía de Cochinos -ocurrida la
madrugada del 19 de abril de 1961- el diario comunista Granma publicó en
primera página que "si el fracaso de la invasión mercenaria
en las arenas de Playa Girón hace cuarenta años constituyó
la primera derrota del imperialismo yanki en América Latina", el miércoles
se produjo una nueva "victoria moral" de Cuba frente a EEUU.
Votos negativos
Viernes, 20 de abril de 2001
Guatemala:
El Gobierno guatemalteco explicó que su voto a favor de la resolución
de condena contra Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de Ginebra se
debió a la situación de tres ciudadanos guatemaltecos que se
encuentran presos en la isla desde hace tres años por su presunta
vinculación con una serie de antentados perpetrados en zonas hoteleras en
1998, sin que hayan sido sometidos a juicio. Además, el ejecutivo de
Alfonso Portillo instó a Cuba a que acepte la asesoría de la
Comisión de Derechos Humanos, "que nuestro país, por
experiencia propia, considera valiosa en cualquier situación".
Uruguay:
El Gobierno uruguayo defendió ayer su voto de condena a Cuba en la
Comisión de Derechos Humanos de la ONU, al señalar que en el régimen
de Fidel Castro no se ha producido ningún cambio en el tema desde 1999,
cuando Uruguay también apoyó la declaración. El documento
reiteró que, igualmente, Uruguay expresó hoy "su total
desacuerdo con la imposición unilateral de sanciones económicas a
Cuba, que ciertamente no contribuyen al mejoramiento de la situación económico-social
de este país, sino por el contrario empeoran la misma y profundizan las
dificultades que sufre el pueblo cubano". El comunicado del Gobierno
aparece tras las acusaciones que ha recibido desde la izquierda política,
que indicaban que "hubo una actitud unilateral e inconsulta del presidente
Jorge Batlle en un asunto que debe ser de política de Estado".
Nicaragua:
El presidente de Nicaragua, Arnoldo Alemán, se mostró "feliz"
tras conocer la condena de la Comisión de Derechos Humanos de Naciones
Unidas a Cuba, según apuntó a Europa Press Luis Zúñiga,
miembro de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) que habló
por teléfono con el mandatario, al que comunicó la decisión
de la Comisión. La delegación gubernamental nicaragüense cedió
por quinto año consecutivo espacio a Zúñiga para que
condene ante la Comisión de Naciones Unidas la situación en la
isla. Zúñiga, ex preso político cubano, ha participado en
otros foros en Ginebra sobre Derechos Humanos y es el único
cubano-americano que ha presentado testimonio ante los países de
la Comisión para hablar en nombre de las víctimas del régimen
castrista.
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