Yupi Internet, abril 23, 2001.
Bush convierte a Cuba en centro de cuestión democrática
Québec (Canadá), 21 abr (EFE).- En una Cumbre de las Américas
que tiene la consolidación de la democracia como uno de sus temas
centrales, el presidente George W. Bush resumió hoy en Cuba los problemas
democráticos que afectan al continente.
Bush no mencionó directamente a Cuba en su intervención en la
sesión plenaria de la III Cumbre de las Américas que se celebra en
Québec, aunque sí lo hizo de forma más que implícita,
mientras que dedicó a la isla caribeña su discurso radiofónico
de los sábados.
"Sabemos que la libertad llegará un día para el pueblo de
Cuba", dijo el presidente de Estados Unidos en su discurso radiofónico.
En su intervención ante la Cumbre, George W. Bush eludió
hablar sobre los problemas de calidad democrática que sufren otros países
americanos, sino que destacó que "la democracia llega hoy a todos
los países del continente, menos a uno", en referencia a Cuba.
Bush dijo que espera el día "en que todos los pueblos del
continente conocerán los beneficios y la dignidad de la libertad", y
citó en español una frase del héroe de la independencia
cubana José Martí: "la libertad no es negociable".
A esta cumbre asisten los jefes de Estado o de Gobierno de 34 países,
todos los de América excepto Cuba, que no ha sido invitada debido a su régimen
de gobierno no democrático.
Uno de los objetivos de la cumbre es precisamente consolidar la estabilidad
y la calidad democrática del continente, y la declaración final,
que será firmada este domingo, incluirá el aviso de que los países
que abandonen la senda democrática verán peligrar su participación
en este proceso.
El documento advierte de que "el mantenimiento y fortalecimiento del
Estado de Derecho y el respeto estricto al sistema democrático" no sólo
son un compromiso compartido, sino también "una condición
esencial de nuestra presencia en esta y futuras Cumbres".
Un alto funcionario estadounidense consideró que se trata de "una
declaración muy fuerte" sobre este compromiso a favor del
reforzamiento democrático, que irá unido a la ampliación
del papel de la Organización de Estados Americanos (OEA), y que también
se aprobará en esta cumbre.
La reunión de Québec también consagrará la
creación para el 31 de diciembre del 2005 como máximo del Area de
Libre Comercio de las Américas (ALCA), y Bush repitió su idea de
que el comercio abre vías de salida a la pobreza y el narcotráfico,
dos graves problemas que pueden debilitar las democracias del continente.
El gobernante retomó el caso cubano en su discurso radiofónico
de los sábados, emitido por Estados Unidos mientras se celebraba la
Cumbre, y en el que destacó que "sólo un país del
hemisferio occidental no está representado, porque ese país, Cuba,
es el único que no es aún una democracia".
El presidente estadounidense destacó los progresos de la democracia
en América, y recordó que "unos 800 millones de personas"
en el continente viven en regímenes democráticos, mientras que
otros 11 millones, los habitantes de Cuba, "viven bajo una dictadura".
En su discurso radiofónico, Bush también se felicitó
por la aprobación, esta semana, en la Comisión de Derechos Humanos
de la ONU, de una resolución que condena al Gobierno de La Habana por la
situación de los derechos humanos.
La resolución, que fue propuesta por la República Checa, tenía
el fuerte apoyo de Washington, que vio cómo otros dos países
latinoamericanos -Argentina y Uruguay- votaban a favor.
En cambio, México -sólido aliado político y económico
de EEUU- se abstuvo, pues aunque reconoció que hay problemas de derechos
humanos en Cuba, consideró que el texto de la resolución discutida
en Ginebra tenía un "doble rasero", en referencia a que la
resolución no mencionaba el embargo económico de Washington a la
isla.
La preocupación por el embargo, que dura ya 40 años, también
fue mencionada por Uruguay y Argentina, a pesar de su voto favorable.
Aún así, Bush manifestó en su discurso que estaba "complacido"
por el hecho de que "muchos países de las Américas se unieron
a nosotros en la aprobación de la resolución" que condena la
situación de los derechos humanos en Cuba. EFE
Críticas cubanas no le importan a Jorge G. Castañeda
Quebec, 21 Abr (Notimex).- El canciller mexicano Jorge Castañeda restó
hoy importancia a las críticas en su contra de su homólogo cubano
Felipe Pérez Roque, quien lo acusó de promover un voto de censura
a Cuba en la Comisión de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
"No hay que darle la menor importancia, estos son gajes del oficio que
suceden todos los días en la arena internacional y son asuntos pasajeros
a los que no hay que darles mayor consecuencia", enfatizó el jefe de
la diplomacia mexicana interrogado sobre el tema.
Las insólitas referencias personales a Castañeda fueron hechas
la noche del viernes en cadena nacional de televisión por el ministro de
Relaciones Exteriores de Cuba, en presencia del presidente Fidel Castro.
En su 57 periodo de sesiones, la Comisión de Derechos Humanos de la
ONU aprobó el miércoles una resolución de condena a Cuba
por el estado que guardan los derechos humanos en la isla.
La resolución fue propuesta por la República Checa y aprobada
por 22 votos a favor, 20 en contra y 10 abstenciones, entre ellas la de México.
Entrevistado en el marco de la III Cumbre de las Américas que se
realiza en Quebec, Canadá, Castañeda dijo que le tienen sin
cuidado las críticas y calificativos en su contra.
Dijo que se trata de "comentarios sentidos, ardidos" y anunció
que la diplomacia mexicana continuará su labor de hacer todo lo necesario
para seguir avanzando en su relación bilateral con Cuba en materia económica,
comercial y turística.
"Son gajes del oficio, yo entiendo que ellos estén agitados, un
poquito ardidos por los resultados que se dieron en Ginebra, pero nosotros no
vamos a entrar en una polémica con ellos, no vamos a contestar, no vamos
a entrar en esa dinámica", anotó.
El canciller mexicano dijo que no ha hablado con el presidente de México,
Vicente Fox, sobre ese tema porque existen "otros asuntos un poco más
importantes" y descartó que los dichos de Pérez Roque puedan
afectar la relación mexicana con el país caribeño.
"No voy a entrar al juego de las acusaciones", insistió
Castañeda al mencionar que la declaración en su contra formulada
por el gobierno cubano en voz de su homólogo cubano es "probablemente
para fines internos".
Pérez Roque destacó que la abstención final de México
en Ginebra se debió a "un amplio movimiento popular y de opinión
pública", que incluyó declaraciones expresas de las dos cámaras
del Congreso contrarias a que el voto mexicano fuera condenatorio.
El canciller mexicano, que en años anteriores hizo públicas
sus simpatías con partidos de izquierda en México, se abstuvo de
hablar sobre la relación que ha sostenido con Cuba o con funcionarios de
ese país en el pasado.
"No creo que sea pertinente la historia de mi relación con Cuba,
si alguien quiere escribir la historia, es un libro abierto, pero no creo que
tenga nada que ver con las relaciones entre México y Cuba", sostuvo.
Castañeda señaló más adelante que en la agenda
del presidente Vicente Fox "esta prevista siempre una visita a Cuba, pero
no hay una fecha que esté fijada".
Cuba tilda de "injerencista" lenguaje de canciller canadiense
La Habana, 21 abr (EFE).- Cuba dijo que el canciller canadiense, John
Manley, había empleado un lenguaje "injerencista y anticubano"
en unas declaraciones que enjuician el sistema político de la isla.
La portavoz de la cancillería cubana, Aymeé Hernández,
afirma en un comunicado que los términos de las declaraciones del
canciller canadiense "no se diferencian, sustancialmente, de los que de
forma tradicional usan los gobernantes norteamericanos para justificar el
'bloqueo' a Cuba".
"El canciller Manley, con su lenguaje injerencista y anticubano,
confirma su creciente subordinación y alineamiento con la política
exterior del imperio norteamericano", señaló.
Según el documento, las palabras del ministro canadiense indican "un
abandono de la vocación tercermundista en la arena internacional, que fue
el sello distintivo, y motivo de orgullo de Canadá y los canadienses, por
muchos años".
La declaración considera que "son francamente inaceptables y
ofensivas las declaraciones del representante de un país como Canadá,
que en materia de derechos humanos debería de explicar su dudoso récord
de respeto y atención a los derechos de sus pueblos nativos".
"Nos preguntamos -añadió- si la política de Canadá
hacia Cuba hoy está siendo formulada en Ottawa o en Washington".
"Resulta irónico -dice el texto- escuchar lecciones del
canciller de un gobierno que reprime brutalmente hoy en las calles de Québec
las voces de un segmento importantísimo de su población, que trata
legítimamente de expresar de manera pacífica sus opiniones sobre
los peligros de la globalización neoliberal, en la ya tristemente célebre
tercera versión de la Cumbre de las Américas".
El presidente cubano, Fidel Castro, envió ayer un mensaje de "simpatía
y iración" a las personas que se manifiestan en Québec
(Canadá) contra la globalización, que han protagonizado
enfrentamientos con la policía cerca del Centro de Congresos donde se está
celebrando la III Cumbre de las Américas.
Castro calificó de "brutal" la forma en que las autoridades
de Canadá "reprimen las manifestaciones pacíficas de los que
protestan contra el crimen que se quiere cometer contra los derechos políticos
y económicos de los pueblos de América Latina y el Caribe".
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