OLA
REPRESIVA
Primera
comunicaci�n telef�nica de periodista independiente
preso en cuatro meses 6m1s6d
LA HABANA, 4 de agosto (cubanet.sergipeconectado.com) - Despus
de cuatro meses de encierro, el periodista independiente
Julio Csar Glvez Rodrguez
pudo comunicarse telefnicamente con su
esposa, la tambin periodista independiente
Beatriz Pedroso, residente en la capital.
Julio Csar Glvez cumple quince
aos de prisin en la crcel
provincial de Villa Clara, en la ciudad de Santa
Clara. Desde all se comunic con
la esposa, a quien manifest que mantiene
buen estado de nimo y est recibiendo
algunas mejoras, a pesar de confrontar
ciertos problemas de salud.
"Julio me cont -explica la seora
Pedroso- que tanto l como los otros presos
advierten un trato correcto de las autoridades
del penal. Ahora disponen de colchones, del sbado
para tomar sol, higienizacin, y las celdas
han sido pintadas".
Explica adems que ella considera que
esas mejoras de las psimas condiciones
de vida del penal pudieran ser una respuesta indirecta
a la carta que dirigi hace alrededor de
un mes a la Direccin Nacional de Prisiones,
en la que plantea la situacin de salud,
de higiene y vida en general de su esposo en aquella
prisin, y peda una entrevista
para explicar personalmente los pormenores. Entrevista
que no le ha sido concedida, ni tampoco la misiva
ha recibido respuesta.
"Planteo que los reos -aade la seora
Pedroso-, entre stos mi esposo, son mantenidos
en celdas hmedas, que duermen en colchones
rellenos con esponjas de mar con incrustaciones
calcreas, con muchas chinches y problemas
de salud".
Para corroborar sus planteamientos, Beatriz dio
a leer a este reportero una carta de Glvez
con fecha 21 de julio, en uno de cuyos prrafos
dice:
"Ayer tuvimos consulta con el ortopdico.
Mir las placas que me hicieron y dice
que tengo severa artrosis cervical. Me mand
a dormir en tabla con una colchoneta (sin almohada)
de huata. El colchn est hecho
de esponja de mar, las que estn secas
y muy duras formando grandes bultos disparejos
que me muelen la espalda. Esperamos a ver si resuelven
las cosas, pues tanto Hctor Maseda como
yo estamos en la misma situacin".
Cuenta Pedroso que a los reos de conciencia recluidos
en la prisin provincial de Villa Clara,
los presos comunes los han bautizado como "los
profetas", porque hablan en tono mesurado
y dicen sus verdades sin ofender a nadie. Y cuando
hablan los "polticos" todos
callan para escuchar con atencin. cnet/12
|