NOTICIAS DE CUBA El Nuevo Herald 1jz69

Wilfredo Cancio Isla, El Nuevo Herald. 11 de marzo de 2007.

Pretenda regresar en el primer avin o en el primer barco a una Cuba democrtica y morir mirando el sol de Oriente en su natal Puerto Padre, a la orilla del mar. Pero la vida no le alcanz a Agustn Tamargo para cumplir su ltimo deseo, que proclamaba en sus programas radiales, columnas periodsticas e imaginarios dilogos con Dios.

Los restos de Tamargo --personalidad excepcional del periodismo cubano en el exilio-- fueron sepultados ayer en una bveda del cementerio Woodlawn Park de la Calle Ocho tras una emocionante jornada de despedida, que reuni a familiares y amigos, figuras polticas, lderes comunitarios y pblico en general.

Los congresistas cubanoamericanos Mario y Lincoln Daz-Balart se encontraban en el pblico.

''Por su talento, Agustn Tamargo hubiera tenido muchas oportunidades en este mundo, pero prefiri consagrarse a la causa de la libertad, expresndolo, proclamndolo y hasta gritndolo'', expres Monseor Agustn Romn, obispo auxiliar emrito de la Arquidicesis de Miami, durante una ceremonia celebrada en la Iglesia de St. Kieran.

Unas 400 personas se congregaron en el recinto catlico, al pie de la Ermita de la Caridad en Coconut Grove, para asistir a una misa de cuerpo presente previa al sepelio. La eucarista reuni a representantes de la jerarqua eclesistica cubana en el exilio, entre ellos Monseor Felipe Estvez, obispo auxiliar de la Arquidicesis de Miami, y los sacerdotes Jose Luis Menndez y Alberto Cuti.

Casi al trmino de la misa, la actriz Eva Tamargo subi al plpito para leer un texto escrito por su padre en aos recientes a manera de invocacin a Dios, y en el cual le cuestiona haberle destinado a vivir sus ltimos aos fuera de Cuba.

La lectura transcurri entrecortada por los sollozos de la actriz y consigui emocionar profundamente a los asistentes, que al finalizar el texto, aplaudieron de pie en medio de gritos de "Viva Cuba Libre''.

''Agustn Tamargo descansar en paz, pero sus sueos y esperanzas aguardan por una Cuba nueva, la Cuba posible que el so'', seal Monseor Estvez.

Una caravana de autos acompa luego al carruaje fnebre desde la iglesia al cementerio de la Calle Ocho y la 32 avenida, donde yacen los restos de importantes figuras de la Cuba republicana y la comunidad exiliada.

Junto al fretro se escucharon las notas del himno nacional cubano y el cantante Manolo Torrente, amigo cercano de Tamargo, interpret la legendaria cancin Lgrimas Negras, de Miguel Matamoros.

''Tamargo fue uno de los pilares del periodismo y el exilio cubanos'', dijo el abogado Rafael Pealver, presidente del Instituto San Carlos de Cayo Hueso. "Hemos perdido un hombre que se enorgulleca de sus races cubanas y que hablaba con el corazn''.

Ayer la bandera cubana en el Instituto San Carlos onde a media asta en tributo al periodista, que falleci el pasado mircoles a los 82 aos en un hospital local.

Considerado una figura emblemtica del periodismo cubano en la etapa republicana, Tamargo se exili en 1960 tras discrepar pblicamente con el rgimen de Fidel Castro. En el exilio particip en el proyecto de Bohemia Libre, dirigi los diarios El Tiempo y El Diario La Prensa en Nueva York, y desde 1980 se convirti en una de las personalidades de la radio en espaol de Miami.

El da en que Cuba perdi el futuro

Wilfredo Cancio Isla / El Nuevo Herald. 11 de marzo de 2007.

La historia cubana estuvo a las puertas de un alumbramiento promisorio 50 aos atrs, muy diferente al curso totalitario que le imprimi Fidel Castro tras su llegada al poder en 1959. La especulacin histrica es siempre riesgosa, pero cuando se trata de revisitar la fecha del 13 de marzo de 1957 no deja de ser tentadora.

Cul sera el destino de Cuba si la accin armada contra el Palacio Presidencial de La Habana hubiera conseguido liquidar al dictador Fulgencio Batista y abrir una etapa de transformaciones democrticas en el pas? Haba lugar para la revolucin castrista tras el magnicidio del entonces hombre fuerte de Cuba? Y quedara espacio de liderazgo para Castro y sus seguidores si el lder estudiantil Jos Antonio Echeverra hubiera tomado las riendas de la renovacin nacional?

Al cumplirse cinco dcadas de los trgicos sucesos del Palacio Presidencial, la ocupacin de la emisora Radio Reloj y la posterior Masacre de Humboldt 7, quedan an en pie las interrogantes y los sueos inconclusos de una generacin de cubanos que apost por el civismo y la vida constitucional en la isla. El programa del Directorio Revolucionario y los ideales democrticos de Echeverra terminaron diluidos en una avalancha revolucionaria que pronto torci sus promesas y deriv en una larga pesadilla autocrtica, investida de socialismo.

Todava retumban en la memoria de muchos cubanos los latidos de aquella jornada heroica y sangrienta. Pocas acciones patriticas del siglo XX cubano se conservan en el imaginario nacional con el aliento mtico de hombrada que fij el ataque al Palacio Presidencial. Cincuenta jvenes tomaron las armas con la confianza de que ajustaran cuentas a Batista en su propio despacho. El ex combatiente de la Guerra Civil espaola, Carlos Gutirrez Menoyo, fue el responsable del plan militar, y Menelao Mora se encarg de coordinar la operacin. Los asaltantes se desplazaron hacia all en dos automviles y una camioneta de la firma Fast Delivery, que an se conserva como objeto museable en La Habana. Gutirrez Menoyo encabez el operativo y abri paso a dos grupos de asalto que comandaban Faure Chomn y Ricardo Olmedo.

El combate dentro del Palacio Presidencial fue cruento y la guarnicin ofreci dura resistencia. Los combatientes que escalaron hasta el segundo piso de la edificacin comprobaron que Batista se haba escabullido por una escalera interior aledaa a su oficina. La balacera dej 29 asaltantes muertos -- Menoyo y Mora entre ellos -- y los restantes, sin refuerzos ni municiones, lograron escapar y esconderse en refugios de la ciudad.

Casi simultneamente, a las 3:21 p.m., Echeverra entraba a la cabina de Radio Reloj para interrumpir la transmisin e iniciar su histrica alocucin al pueblo de Cuba, dando a conocer la presunta muerte del dictador. La enardecida intervencin fue cortada y el presidente de la Federacin Estudiantil Universitaria (FEU) sali de la emisora en una caravana de tres automviles, rumbo a la Universidad de La Habana. Minutos despus cay abatido cuando enfrent, pistola en mano, a un carro policial que casualmente se interpuso en el camino. En el suelo, un agente represivo lo remat con dos balazos en el pecho y uno en la cara.

Lucy Echeverra, su hermana menor, recuerda aquella tarde con la nitidez de un acontecimiento que se repite hasta el infinito en su memoria. Tena entonces 17 aos y viva con su familia en la ciudad de Crdenas, en la provincia de Matanzas. ''Nos empezaron a llamar a la casa para que pusiramos Radio Reloj'', rememor ella. 'Alguien nos inform que haba un muerto de apellido Hechevarra, con 'H', pero presentamos que haba sucedido algo terrible. . . despus nos confirmaron la noticia desde La Habana''.

En el exilio desde el 11 de diciembre de 1961, Echeverra evoca en esta conversacin al hermano desparecido a los 24 aos y remarca las diferencias irreconciliables entre el lder estudiantil y Castro, an en los momentos de la alianza estratgica suscrita entre ambos el 31 de agosto de 1956 y conocida como la Carta de Mxico.

Cmo fue su infancia junto a Jos Antonio?

Imagnate, era la nia mimada por tres hermanos varones en una tpica familia cubana. Fue una infancia muy placentera, porque vivamos frente al parque de Crdenas y me pasaba el da jugando all, protegida por mis hermanos. Jos Antonio, que era el mayor, tena una relacin muy especial conmigo. A l le gustaban mucho los deportes. Jugaba bien el baloncesto, pero no poda esforzarse al mximo por el asma, que con frecuencia lo dejaba sin aire y con los cachetes colorados. De ah surgi aos despus el apodo de Manzanita.

Cul fue la fuente que nutri el espritu rebelde y libertario de su hermano?

Crec viendo a mi hermano enfrascado en defender a sus compaeros en la escuela cada vez que surga una injusticia. Creo que l naci con esa cualidad, era un justiciero nato. Pero esa vocacin de justicia se mezclaba con un carcter risueo y un profundo sentido de pertenencia familiar. Tocaba la guitarra, le gustaba cantar y era un pintor excepcional. Guardo varios de sus dibujos. Y tena una fe religiosa muy honda, cobijada en el seno familiar. Mi hermano iba a misa casi a diario, rezaba, comulgaba y andaba siempre con dos rosarios en el bolsillo.

Fueron justamente esas condiciones las que lo llevaron a liderar la FEU y el movimiento estudiantil cubano despus del golpe de estado del 10 de marzo de 1952. Estaban ustedes conscientes de que esa temeridad manifiesta podra poner en peligro su vida en cualquier momento?

El golpe de estado de Batista transform su vida. Sabamos que l estaba decidido a todo. Desde el mismo 26 de noviembre de 1952, cuando se lanz al terreno del estadio del Cerro para desafiar a la dictadura, su vida estaba en peligro. No fueron pocos los enfrentamientos y los golpes que cogi de la polica. El discurso de la Sociedad de Amigos de la Repblica, en el Muelle de Luz, para rechazar las fraudulentas elecciones que se preparaban en 1955, fue un desafo frontal a Batista.

Usted dice que presenta que su hermano estaba en ''algo grande''. Tuvieron alguna idea de la accin del 13 de marzo?

El le dijo a nuestro hermano Sinforiano que le pidiera a mam que rezara mucho por l. Sinforiano le insisti en que si iba a haber alguna accin l quera sumarse. Pero l se neg y le argument que alguien tena que quedar para cuidar a nuestros padres. Nuestro hermano Alfredo, el que le segua a Jos Antonio, haba muerto en un accidente automovilstico en 1956.

Estaba decidido a morir?

Absolutamente. Cuando sali de la toma de Radio Reloj le pidi al moro Asseff [uno de los asaltantes] que se subiera en el mismo carro con l y le dijo: "Ven conmigo que me voy a morir''.

Por eso se ha dicho que la muerte de Echeverra fue un acto suicida, cuando sali del automvil, con un arma en la mano, para enfrentar al carro de la polica que les cerr el paso.

Fue un acto desafiante, pero de un valor incalculable. Porque el tiro estaba sato y haba que tener los. . . pantalones bien puestos para fajarse de frente con la polica. Yo creo que l no imagin que los cuatro compaeros que lo acompaaban en el carro lo iban a dejar solo.

Todava hoy muchos antiguos del Directorio y colaboradores de Jos Antonio mantienen distancia con la Carta de Mxico, firmada con Castro. Cmo recuerda usted ese momento histrico?

Mi hermano saba quin era Fidel Castro, un personaje frustrado que no logr nunca ser electo ni delegado de escuela. Cuando regres de Mxico, le dije: ''Qu has hecho, mi hermano?'' Me respondi que l haba firmado con Dios y ahora con el Diablo, pero que no me preocupara, porque cuando el movimiento estudiantil triunfara habra que bajar a Fidel Castro a tiros de las lomas.

Cmo fueron las relaciones con Castro despus del triunfo de la revolucin?

El 8 de enero de 1959, antes de entrar triunfante en La Habana, Fidel Castro vino a nuestra casa en Crdenas a darle un abrazo a mi madre. Le dijimos que en nuestra casa no haba fiesta, sino dolor y pena. Lleg hasta el cuarto, se sent, nos escribi una carta de respaldo y nos pidi que lo acomparamos a La Habana para resolver los problemas que haba con el Directorio, pues l con Faure Chomn no tena nada que hablar. Fuimos juntos al cementerio y l hablo ante la tumba de mi hermano. Le prometimos que bamos a ayudar a solucionar las dificultades, pero Fidel Castro ya tena planeado el desenlace. Todo era una farsa.

Cundo se produce el rompimiento definitivo entre la familia Echeverra y el proceso revolucionario?

Muy pronto, en la celebracin del segundo aniversario del 13 de Marzo. Cuando leyeron el testamento poltico de mi hermano, le quitaron la referencia a Dios en el texto. Entonces mis padres, mi hermano Sinforiano y yo nos pusimos de pie y abandonamos el acto. Fidel Castro lanz entonces sus improperios, asegurando que los que se marchaban, que ramos nosotros, no podran detener la marcha de la revolucin. Fue la nica vez que mi madre particip en un acto pblico en su vida. A finales de 1962 toda nuestra familia estaba ya en el exilio.

Por estos das Cuba ha lanzado una campaa de donacin de objetos del movimiento estudiantil para festejar el 50 aniversario del acontecimiento. Qu le parece?

Una vergenza. La casi totalidad de las pertenencias, documentos y fotos de Jos Antonio pudimos sacarlas de Cuba. Lo que qued en mi casa, se lo robaron para establecer el Museo Casa Natal de Jos Antonio Echeverra. Como mismo se rob Fidel Castro la bandera del movimiento estudiantil universitario para que el fantasma de Jos Antonio no le cayera encima.

Regresara a Cuba?

No pretendo regresar a Cuba a buscar nada. El da que el pas retorne a una vida democrtica, llevaremos las pertenencias de Jos Antonio a su tierra natal.

Cmo le gustara que los cubanos del futuro miraran a Jos Antonio?

Como un hombre de ideales puros y un corazn que no le caba en el pecho.

AGUSTIN TAMARGO (1924-2007)
Muere un patriarca del periodismo cubano

Wilfredo Cancio Isla, 9 de marzo de 2007.

Agustn Tamargo, el periodista que con ms pasin exalt el nombre de Cuba y los cubanos en el exilio, falleci la noche del mircoles en Miami a los 82 aos.

Tamargo, figura insigne del periodismo cubano del siglo XX y patriarca de la radio hispana en Estados Unidos, muri a las 10 p.m. en el Hospital Mount Sinai de Miami Beach, donde ingres gravemente enfermo das atrs.

Su fallecimiento se produjo por un paro cardaco luego de mltiples complicaciones derivadas del cncer de garganta que combata desde el 2004. Desde entonces tuvo frecuentes recadas con crisis de neumona, que obligaron a hospitalizarlo en varias ocasiones.

La noticia de su muerte cubri de luto la maana del jueves a la comunidad exiliada de Miami. Cientos de mensajes y llamadas inundaron desde muy temprano los espacios de Radio Mamb (710 AM), la emisora donde Tamargo trabaj por los ltimos veinte aos.

''Mi padre estuvo siempre a mi lado, gui mis pasos e inspir mi vida'', dijo su hija Eva Tamargo sin poder contener las lgrimas. "Cuba fue su pasin y estos ltimos meses se sentaba por horas en el jardn, rodeado de plantas, imaginndose que regresaba a Puerto Padre [su pueblo natal]''.

No se cans de repetirlo en sus columnas y programas radiales ms recientes, invocando incluso a Dios para que le concediera --al final de su existencia-- un nico deseo: devolverlo a la tierra que lo vio nacer, en el oriente cubano, el 14 de agosto de 1924.

Tamargo estudi en Puerto Padre hasta nivel secundario y se incorpor al periodismo apenas con 15 aos. En su localidad labor en el semanario La Idea y en la revista Alborada, donde public algunos poemas de juventud.

Sus tempranas inquietudes literarias y simpatas con las ideas de izquierda le abrieron el camino hasta el clebre poeta Nicols Guilln (1902-1989), a quien Tamargo present durante un acto en el Central Delicias de Puerto Padre, en 1940.

Con 17 aos contrajo matrimonio con su amor de juventud y esposa de toda la vida, Rosalba Npoles. En 1944 el matrimonio decidi mudarse a La Habana, donde Tamargo trabaj inicialmente como redactor y crtico cultural del diario Hoy, rgano de los comunistas cubanos.

Desde entonces trab amistad con figuras del mundo poltico e intelectual que marcaran sus pasos posteriores: el periodista Rolando Masferrer, y los escritores Lino Novs Calvo y Carlos Montenegro.

Amante de las tertulias habaneras y de la vida cosmopolita, Tamargo quiso descubrir mundo y viaj a Nueva York en 1946. ''Fue un viaje de aventura, me interesaba la cultura y darme el chapuzn de esa gran ciudad'', recordara aos despus al evocar su experiencia neoyorquina como empleado de factoras y restaurantes.

''Era un bohemio, un hombre con un talento desbordante, un impresionante poder de retencin y una cultura enciclopdica, a pesar de que su formacin fue totalmente autodidacta'', relat Pedro Yanes, fundador de la famosa librera Las Amricas y amigo de Tamargo por ms de 50 aos. "Su concepto de la amistad era sagrado, y saba anteponerlo incluso hasta con sus adversarios polticos.''

Tras su regreso a Cuba en 1951, vivira una etapa de plenitud en el periodismo republicano. Trabaj como redactor en Unin Radio, populariz su columna Pngale el Cuo en el diario Tiempo en Cuba, dirigido por Masferrer, y fue articulista de Avance. Su popularidad como comentarista poltico llam la atencin de Miguel Angel Quevedo, director de la legendaria revista Bohemia, donde Tamargo comenz a escribir sus columnas en 1953.

Fue en esos aos un tenaz opositor de la dictadura de Fulgencio Batista y colabor con la Sociedad Nuestro Tiempo, que reuni a la vanguardia intelectual y artstica de la poca. Su posicin poltica lo oblig a salir al exilio en Argentina en 1958, en momentos en que tambin funga como director del Canal 2, propiedad del zar de la televisin Gaspar Pumarejo.

Un ao despus regres de Buenos Aires a La Habana tras conocerse el triunfo de la revolucin de Fidel Castro, y lo hizo en un vuelo especial donde viaj la madre del guerrillero Ernesto Che Guevara.

Pero tan pronto Castro comenz a coartar las libertades civiles, Tamargo alz su voz para oponrsele. ''Usted no quiere periodistas, lo que usted necesita es fongrafos'', escribi el periodista poco antes de tomar definitivamente el camino del exilio en 1960.

Radicado en Nueva York, se sum al proyecto de publicar Bohemia Libre en compaa de su colega y entraable amigo Quevedo. En 1963, Tamargo se traslada a Venezuela para continuar la edicin de Bohemia Libre hasta 1969, fecha del suicidio de Quevedo.

Fue Tamargo quien hall el cadver de Quevedo, le cerr los ojos, recogi el arma, limpi la sangre y despidi el duelo del director de la famosa revista semanal. Reconoca orgulloso que su ms preciada posesin eran las cartas privadas de Quevedo.

Tamargo volvi entonces a Nueva York donde dirigi los peridicos hispanos El Tiempo y El Diario La Prensa, antes de venir a Miami en 1980.

En Miami se convirti desde 1984 en una figura emblemtica de la radio en espaol y del periodismo local. Labor como director de noticias y comentarista en WRHC-Cadena Azul, Unin Radio, WQBA-La Cubansima, WSCV-Canal 51 y, finalmente, en Radio Mamb.

''Tamargo va a ser recordado como un hombre excepcional y un cubano difcil de igualar'', expres anoche Salvador Lew, quien introdujo a Tamargo en Cadena Azul. "Un tipo nico, caballeroso y decente, a quien no le importaba pasar necesidades econmicas si poda hacer su trabajo en favor de la causa de Cuba''.

Lew record que "al principio Tamargo dud si iba a dar la talla en el medio radial, porque l se senta ms un escritor de prensa escrita''.

Pero las dudas se disiparon en poco tiempo. En la radio miamense Tamargo hizo historia con el popular programa Mesa Revuelta y su columna de anlisis poltico Al pan, pan y al vino, vino, que terminaba siempre con una reafirmacin de su cubana: "Cuba primero, Cuba despus y Cuba siempre''.

Fue tambin columnista dominical de El Nuevo Herald desde 1987. Su ltima colaboracin se public el 19 de marzo del pasado ao.

Nunca quiso asumir la ciudadana estadounidense. Nunca vot en una eleccin presidencial, ni en Cuba ni en el exilio. Nunca manej un automvil, ni abandon la pipa de fumar, ni siquiera en los das de la enfermedad.

La obsesin por el regreso a una Cuba democrtica se acrecent en los ltimos aos, afectado ya por la enfermedad. Declaraba que su mayor miedo era "morir sin ver otra vez el sol de Oriente''.

''Quisiera morir en una vieja cama, en una vieja casa, de un viejo pueblo que est a la orilla del mar'', afirm en una entrevista del 2003.

Ayer la emisora Radio Mamb dedic sus espacios habituales a rendir tributo al periodista fallecido, mientras se transmitan mensajes de condolencia de los congresistas cubanoamericanos, lderes comunitarios y pblico en general.

''Parti este gladiador dejando sembrada una huella de dignidad y patriotismo entre nosotros'', dijo el comentarista Armando Prez Roura, director de Radio Mamb. "Estamos tristes como todo el que lo conoca y saba que Tamargo era un valor de nuestra cultura y nuestra historia''.

Lo sobreviven su esposa Rosalba y siete hijos: Ariel, Manuel, Lila, Sal, Nora, Eva y Jos Luis. Adems de seis nietos y un biznieto.

El velorio de Tamargo se efectuar hoy a partir de las 6 p.m. y hasta la medianoche en la Funeraria Caballero Rivero Woodlawn, ubicada en la 8200 SW 40 St, Miami.

Maana habr una misa en su memoria, a las 12:30 p.m., en la Iglesia St. Kieran (aledaa a la Ermita de la Caridad), en el 3605 S. Miami Ave., Coconut Grove. La ceremonia ser oficiada por Monseor Agustn Romn. El entierro ser a las 3 p.m. en el Cementerio Woodlawn Park de la Calle Ocho y la 32 avenida.

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Silvio Rodrguez enfrenta demanda judicial en Chile

The Associated Press, 9 de marzo de 2007.

SANTIAGO DE CHILE -- Dos abogados presentaron el viernes una demanda por infraccin a la ley del consumidor contra el trovador cubano Silvio Rodrguez, luego que ste cancel el da anterior a ltima hora un concierto que ofrecera en la ciudad de Talca.

Los abogados Rodrigo Gonzlez y Eduardo del Campo sealaron a la prensa que la demanda ante la Corte de Apelaciones de Talca, a 250 kilmetros al sur de la capital, representa a gente que haba adquirido boletos para ver a Rodrguez, quien dijo en un comunicado que cancel la presentacin por las crticas al alto precio de las entradas.

La demanda afecta tambin a Multimsica, la empresa productora de la visita del artista a Chile.

Los boletos costaban entre el equivalente a 75 y 110 dlares y al momento de la cancelacin, ya estaban vendidos los 1.030, capacidad completa del teatro.

Si los tribunales fallan a favor de los querellantes, la sancin para Rodrguez y Multimsica sera en dinero.

"El concierto se suspende por decisin ma, al conocer las reiteradas manifestaciones de inconformidad por los precios de las entradas, a pesar de haberse vendido todo el teatro", dijo Rodrguez en un comunicado difundido por la productora. "Pido disculpas a las personas que pagaron 1.030 entradas y a la produccin por los inconvenientes que mi decisin pudiera causar".

El cantante reiter "la necesidad de crear un mecanismo estatal para que los artistas que visitamos Chile podamos hacer al menos un concierto gratuito".

Mientras, Ana Mara Lepe, una mujer de Talca que haba organizado las protestas por el precio de las entradas, denunci que ha recibido "graves amenazas" y recurri a los tribunales, pidiendo proteccin.

"Llevo ms de veinte aos cantando sus canciones y creyendo su mensaje. No esperaba esto", agreg ante periodistas, sobre la reaccin del cantante.

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