8 de noviembre de 2007
Crnica VOLVER AL INICIO
8 de noviembre de 2007

En peligro de extincin f451r

Roberto Santana Rodrguez


LA HABANA, noviembre (cubanet.sergipeconectado.com) - En una reciente visita que realic a una policlnica “descubr” a un mdico “en peligro de extincin” a juzgar por los comentarios escuchados y por los hechos que nos golpean a diario.

Fernando es especialista en medicina general integral, clnico, que atiende a todo el que acude a su consulta haciendo gala de infinitas cortesa y amabilidad, sin importarle el tiempo que le tome tal menester.

Comienza a consultar a las 8 de la maana y no tiene hora fija para terminar la faena. Mientras haya un paciente no abandona la consulta.

“Son las tres de la tarde y todava esta consultando”, dice maravillada una mujer, auxiliar de limpieza en la policlnica. Muchos de los colegas del doctor, a esa hora, ya hicieron mutis por el foro, como lo atestiguan las salas silenciosas, y que contrasta con la animacin y tumulto que reina en la maana.

Agradecimiento, consuelo y esperanzas despierta el doctor Fernando en cada paciente que le visita en busca de alivio y cura para las enfermedades que los aquejan.

En retribucin a la atencin esmerada que reciben del doctor Fernando, muchos pacientes le regalan alimentos, cajitas de comida, pizzas, cervezas, refrescos, etc.

La gente se conduele del hombre ante las desfavorables condiciones de trabajo en las que se desenvuelve: calor sofocante, hambre, debido a las pocas opciones de alimentacin que se ofertan en el centro asistencial, y las dificultades que enfrenta a diario para trasladarse de su casa a la policlnica.

Y por qu mdicos como Fernando estn en peligro de extincin en el sistema asistencial cubano? Es obvio que las dificultades mencionadas pesan mucho.

Adems entran a escena otros factores que no estimulan a los doctores.
Los mdicos y dems personal de la salud pblica ven que cualquiera: merolico, un constructor por cuenta propia, un botero o taxista, un vendedor del mercado agropecuario, un botones en un hotel o un maletero en el aeropuerto, reciben ingresos superiores a los suyos.

De ah que muchsimos aspiren a enrolarse en una de las llamadas misiones internacionalistas para traer de all lo que no tienen en su pas, pacotilla, computadoras, equipos de DVD, y tal vez disponer de una vivienda propia, segn los resultados de su trabajo y el tiempo que permanecieron en el exterior.

Quisiera equivocarme, y que a pesar de todos los pesares mdicos como Fernando abunden en los centros asistenciales de salud cubanos. Profesionales que contra viento y marea siguen atendiendo a los pacientes, haciendo “de tripas corazn” e “inventando”, porque no se da abasto en el reemplazo de los colegas que estn en el exterior, sin recibir pago por las guardias continuadas y enfrentando la carencia de recursos que existen.

Quiera Dios que mas temprano que tarde acaben las distorsiones del surrealismo que hoy campean en Cuba porque el doctor Fernando en mi opinin no hace nada del otro mundo, slo cumple a cabalidad con el juramento hipocrtico que hizo una vez, slo cumple con su deber.




CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproduccin de este material, siempre que se le reconozca como fuente.

Archivos
CubaNet no se responsabiliza por el contenido de las pginas externas