Crnicas
30 de abril de 2008

Cuando faltan las mariposas 1q5yr

Lucas Garve, Fundacin por la Libertad de Expresin 5e381h

LA HABANA, Cuba, abril (cubanet.sergipeconectado.com) - Las despejadas noches clidas de abril y mayo son propicias para observar el vuelo de los cocuyos. Un insecto coleptero de Amrica tropical, de unos tres centmetros de longitud, oblongo, pardo y con dos manchas amarillentas a los lados del trax, por las cuales despide de noche una luz verdosa bastante viva. Gracias a esta propiedad, en las noches gozamos con las volantes lucecitas verdosas que transforman la oscuridad en ocasiones en un espectculo ferico.

Hace unos das, en horas de la noche, tuvimos la visita de un cocuyo. Ante nuestra presencia revolote un buen rato sobre los techos de las casas vecinas. Nos trajo con su verdeante trayectoria otra vez la infancia, cuando podamos hasta agarrar una buena decena de ellos y encerrarlos en un pomo de cristal que de inmediato pareca una buja mgica.

A la vista del resplandeciente insecto, la conversacin cambi a recordar cunta variedad de insectos curiosos poblaban los patios y calles del barrio aos atrs. Pero la madre de una vecina, participante de la conversacin trajo el tema de la desaparicin de las mariposas.

Estuvimos de acuerdo que la ausencia de las mariposas era ya evidente desde hace aos. Incluso en casas cuyos techos son altos, en las noches se refugiaban unas grandes mariposas de color pardo oscuro o carmelitas, las que eran objeto de la supersticin popular. En horas contrarias, al inicio de las maanas frescas, ramos testigos de las aladas trayectorias de las mariposas sobre los florales de cada jardn hogareo.

Tal como nos faltan los cocuyos y las mariposas, con su riego de alegra sobre nuestras cabezas en cada visita, hoy nos faltan familiares que han emigrado a otras tierras y solamente en ocasiones nos regocijamos con su efmera compaa.

Ms que una tragedia ecolgica, tambin un drama espiritual sufren las familias cubanas divididas de un lado y del otro del Estrecho de Florida. Para muchos cubanos, las noches son menos luminosas y las maanas ms tristes sin las voces y la compaa que aportaban familiares exilados en el norte.

Cunto cosas perdidas en una vida separada de sus seres queridos! Son horas, momentos de vida que no se apresan ni en la extensin de una carta, ni con la inmediatez de un correo electrnico, ni en la voz anhelante que desde otro telfono nos comunica las ltimas noticias.

Es por esta razn primordialmente que muchos cubanos prestan atencin al posible anuncio de la eliminacin de trabas burocrticas gubernamentales para viajar al extranjero y para los que residen en el exterior puedan regresar a la isla donde nacieron sin necesidad de una visa de entrada.

Potencialmente, Cuba se convertira en un pas de inmigrantes, si no lo es ya; pero los lazos familiares tan estrechos tradicionalmente de los cubanos, aunque se desanuden un poco, no dejarn que se pierdan los os frecuentes entre los de aqu y lo que residen en otras tierras.

Llenar ese espacio abierto en el centro del corazn de las familias constituye una necesidad imperiosa para comenzar a curar la fractura en el alma de la nacin cubana



CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproduccin de este material, siempre que se le reconozca como fuente.