Otro buey con alas 4564m

Jos Hugo Fernndez

LA HABANA, Cuba, junio (cubanet.sergipeconectado.com) - Justo a tiempo acabamos de inventarnos una nueva esperanza. Es algo en lo que hemos hecho ctedra durante medio siglo. Con todo y que nuestros tatarabuelos intentaran alumbrarnos mediante el refranero. “La esperanza es un buey volando”, nos haban dicho. Por ms que para nosotros no es ni siquiera eso.

Acostumbrados a usar la esperanza como tregua para coger aire y acomodarnos el yugo, precisamos ajustar el refrn para que nos encaje: La esperanza es un buey que vuela con alas prestadas a plazos fijos.

Estara de ms aclarar que nuestro buey con alas de estos das se llama Barack Obama. Y nos llega tan oportunamente como toda esperanza que se inventa.

Una vez que la esperanza anterior, la de los cambios (dicen para perfeccionar el socialismo) ha implantado rcord de volatilidad, se impona la invencin de otra esperanza, si bien no mucho ms seria, por lo menos ms slida.

Esta nueva esperanza posee la virtud de haberle activado las neuronas a todos los cubanos, por diferentes que sean nuestras posiciones ideolgicas, incluso nuestros intereses dentro del juego de la poltica.

No slo vale para los millones de desesperanzados que aqu buscan su lucecita al final del tnel, venga de donde venga. Tambin demuestran habrsela tomado a pecho, slo que en otra direccin, nuestros politiqueros que defienden (desde el exterior, claro) la rancia actitud de Bush y su partido hacia la Isla.

El colmo es que hasta el rgimen parece asumir esta esperanza como buey que surca el cielo. Aunque por razones diferentes a las de nuestros desesperanzados de a pie. Derecho a la esperanza podemos tener todos, pero otra cosa sera el derecho de todos a esperar lo mismo de la esperanza.

En cuanto a lo que espera el gobierno, parece estar contenido a su vez en la esperanza de los tericos de la izquierda de Europa, Norteamrica y Amrica Latina, quienes estn desempolvando por estos das la vieja tesis de que lo nico que necesita Cuba para resolver sus problemas es que el imperialismo yanqui nos saque el pie de arriba, ya que el primero y principal de nuestros problemas no es el rgimen, sino quienes desde afuera se han dedicado a obligar al rgimen a que sea nuestro problema.

De modo que si Barack Obama, una vez electo presidente de los Estados Unidos, decidiera sacarnos el pie, de entrada estara otorgndonos la posibilidad de inventar otra esperanza, la prxima quiz, que es la de echar a un lado nuestros problemas e iniciar por fin el camino de las conquistas revolucionarias.

No est mal para ser un buey volando. Menos an si tenemos en cuenta que es el nico que nos queda en el aire. Nuestro lastre mayor no acaba de extinguirse, por ms muerto que est, as que la perspectiva que nos deja es tomar del buey apenas los tarros y el rabo. La siguiente esperanza eran los cambios. Pero este otro buey est perdiendo las alas sin que nada cambie, por ms que siga anuncindose a bufido limpio como esperanza para ms adelante.

Entonces, qu nosrestara en buena lid si no hacer lo de siempre? Terminar apostando por el buey de afuera. A falta de un padre autntico, hijo bastardo.