El santo de los viajeros 2m6d2e

Frank Correa

LA HABANA, Cuba, enero (cubanet.sergipeconectado.com) - San Cristbal es el santo de los viajeros. Tambin es el patrn de La Habana.

En 1966 el equipo Habana gan la Serie Nacional de Bisbol. Mi regalo del da de Reyes esa vez fue un traje del equipo campen. Fue un obsequio del to Nini, quien esa noche nos mand a dormir temprano y se qued conversando con la familia, hasta que, alrededor de las 3 de la maana, lo recogi en casa el camin cisterna que lo introdujo clandestinamente en la Base Naval de Guantnamo.

El permetro de la base norteamericana ha sido burlado muchas veces, en ocasiones de manera increble. La experiencia ms cercana que tengo es la de to Nini escondido dentro del camin lleno de agua, a punto de ahogarse cada vez que el vehculo daba un bandazo apremiado por los baches de la carretera, y respirando el escaso oxigeno que entraba por la escotilla.

El chofer del vehculo era cmplice de Nini, y no cerr del todo la escotilla. El to sacaba la nariz por la abertura y respiraba con desesperacin el aire de la madrugada. Cuando llegaron a la posta cubana el vehculo se detuvo y se escuch la voz del centinela pidiendo un cigarro.

Luego subi al techo, abri totalmente la escotilla y examin el interior alumbrando con una linterna. Slo vio agua, pues mi to se sumergi hasta el fondo y permaneci all largo rato sin salir. El centinela cerr hermticamente la escotilla y autoriz la entrada del camin, que cruz lentamente la franja fronteriza. Nini sinti unos deseos incontrolables de gritar mientras dejaba atrs Cuba y entraba en la libertad.

En una carta, el to cont las peripecias del viaje dentro del camin cisterna, la desesperacin que lo embargaba cuando los bandazos agitaban el agua hasta el techo tapndolo completamente, y la cantidad de lquido que trago durante el trayecto hasta la base norteamericana. Dice que nunca lo ha abandonado la sensacin de ahogo que sinti entonces.

Por l supe que San Cristbal es el santo de los viajeros y el santo patrn de la capital de Cuba. Aquella madrugada del 6 de enero de 1966, antes de partir, decidi regalarme un traje del equipo Habana, para que San Cristbal lo protegiera en su viaje dentro a la libertad.