cubanet.sergipeconectado.com |
CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores, y autoriza la reproduccin de este material, siempre que se le reconozca como fuente y su autor. |
Calor, DVD y telenovelas 3xy3t Lucas Garve, Fundacin por la Libertad de Expresin LA HABANA, Cuba, julio (cubanet.sergipeconectado.com) - Los sofocantes mediodas de julio y agosto obligan a escapar del sol. Es la hora de quedarse en casa, ponerse un short y sentarse frente altelevisor. La venta de lectores de DVD en Cuba en los ltimos dos aos disparel consumo de pelculas y series. Las telenovelas gozan del favor de un pblico mayoritario, aunque las frmulas de estos materiales audiovisuales se repitan. Los amores traicionados, los hijos negados y luego aceptados, los amantes furtivos, las fortunas codiciadas y mucho ms, deleitan y completan la visin de un mundo al que no se tiene fsicamente alcance. El panorama que vemos en las telenovelas es un ms all terrenal. Claro est, con el condimento necesario para que nos entretenga y nos saque por unas horas del desastre cotidiano en que vivimos. Las preferidas son las telenovelas mexicanas. Televisa, Univisin TV Azteca, cuentan con un casting que incluye actores cubanos. Nombres conocidos como Csar vora, Francisco Gattorno, junto a los mejicanos Pablo Montero, Francisco Colunga,atraen a las cubanas aficionadas a las telenovelas. Otras figuras como Sergio Basaez, Lucero, Araceli Armbula, Rosana San Juan, Victoria Ruffo, Carmen Salinas tienen las puertas abiertas en los hogares cubanos al darles vida a personajes romnticos, intrigantes otros, para traernos entretenimiento y desintoxicacin de tanta propaganda poltica. De mano en mano, alquiladas al precio de diez pesos cada disco, copiadas en formato DVD, “quemadas” en CD-ROM, las telenovelas gozan de una increble aceptacin. Sus historias,casi siempre banales, atraen por sus intrigas, por sus ambientes, por mostrar a los cubanos una vida poco creble, pero distinta. A pesar del rechazo del gobierno, las telenovelas se imponen como el mejor medio de pasar el tiempo libre, sobre todo para escapar de la propaganda del rgimen. |