Discurso
del presidente George W. Bush 43xl
El Nuevo Herald,
26 de octubre de 2007.
Muchsimas gracias. Gracias. Buenos
das. Me complace estar nuevamente
en el Departamento de Estado. Les agradezco
por la labor que realizan aqu. Todos
los das, los hombres y mujeres de
este departamento son los emisarios de Estados
Unidos en el mundo. Todos los das,
ayudan al pas a responder a agresores
y llevar paz a pases en dificultades.
Todos los das promueven la misin
de nuestro pas en apoyo a los derechos
humanos bsicos para los millones
a los que se les niegan. La secretaria Rice
me informa constantemente sobre la buena
labor que se realiza aqu en el Departamento
de Estado, y en nombre de una nacin
agradecida, les doy las gracias por su arduo
trabajo y me complace estar con ustedes.
Pocos temas han sido un desafo
para este departamento --y nuestra nacin--
durante ms tiempo que la situacin
en Cuba. Ha transcurrido casi medio siglo
desde que el rgimen de Cuba orden
que los diplomticos estadounidenses
evacuaran nuestra embajada en La Habana.
Esa fue la ruptura decisiva de nuestras
relaciones diplomticas con la isla,
una seal preocupante sobre el futuro
del pueblo cubano y el inicio de una era
nefasta entre nuestros dos pases.
En este edificio, el Presidente John F.
Kennedy habl sobre el embargo econmico
de Estados Unidos contra la dictadura de
Cuba. Y fue aqu que anunci
el fin de la crisis de misiles que casi
hizo que el mundo se precipitara a una guerra
nuclear.
Hoy, otro presidente viene, con esperanza,
para tratar una nueva era para Estados Unidos
y Cuba. Se avecina el da en que
el pueblo cubano trazar su propio
curso para una vida mejor. Se avecina el
da en que el pueblo cubano tendr
la libertad que aguarda desde hace tanto
tiempo. (Aplausos).
Seora secretaria, gracias por su
presentacin. Me complace estar con
usted y el embajador Negroponte y todos
los que trabajan aqu. Gracias por
la hospitalidad. Me complace estar aqu
con nuestro secretario de Comercio, el secretario
Carlos Gutirrez, nacido en Cuba.
Les agradezco a los dems
de mi gobierno que estn aqu.
Deseo agradecerles en particular a los
del Congreso que nos acompaan:
el senador Mel Martnez, nacido en
Cuba; la congresista Ileana Ros-Lehtinen,
nacida en Cuba; Lincoln Daz-Balart,
nacido en Cuba; su hermanito (risas) Mario
Daz-Balart. Quiero darles las gracias
a Chris Smith, congresista de Jersey, por
acompaarnos; Thaddeus McCotter,
Michigan; Debbie Wasserman Schultz, de Florida,
como tambin a Tim Mahone de Florida.
Les agradezco su presencia.
Les agradezco a los del cuerpo
diplomtico que nos acompaan.
Les agradezco a los embajadores de la Organizacin
de Estados Americanos que estn con
nosotros. Les quiero agradecer en particular
a las familias cubanas que me acompaan
en el estrado.
Una de las grandes historias de xito
del siglo pasado es el avance de la libertad
econmica y poltica en toda
Amrica Latina. En esta sala estn
presentes funcionarios representantes de
pases que acogen con los brazos
abiertos las bondades de un gobierno democrtico
y la libre empresa. Y Estados Unidos se
enorgullece y trabaja activamente con ustedes
en su transformacin.
Un pas en nuestra regin
an asla a su pueblo de la
esperanza que conlleva la libertad y lo
mantiene cautivo en un sistema que le ha
fallado. Hace cuarenta y ocho aos,
al inicio de la revolucin cubana,
sus lderes hicieron una prediccin.
Dijo --y cito: ''Los peores enemigos que
la revolucin cubana puede enfrentar
son los propios revolucionarios''. Una de
las grandes tragedias de la historia es
que esa sombra profeca se
hizo realidad.
Los gobernantes de Cuba prometieron libertad
individual. En cambio, les negaron a sus
ciudadanos derechos bsicos que el
mundo da por sentado. En Cuba es ilegal
cambiar de trabajo, mudarse de casa, viajar
al extranjero y leer libros o revistas sin
la aprobacin explcita del
Estado. Es ilegal que ms de tres
cubanos se renan sin permiso. Los
programas de vigilancia vecinal no estn
pendientes de delincuentes. Ms bien,
vigilan a sus conciudadanos. mantenindose
al tanto de las idas y venidas de sus vecinos,
quines los visitan y qu
emisoras de radio escuchan. El sentido de
comunidad y la simple confianza entre seres
humanos no existe.
Los gobernantes de Cuba prometieron una
era de avance econmico. En cambio,
trajeron varias generaciones de miseria
econmica. Muchos de los autos en
las calles son de antes de la revolucin.
y algunos cubanos dependen de carrozas a
caballo para transportarse. La vivienda
para el cubano promedio est en muy
malas condiciones, mientras que la clase
gobernante vive en mansiones. Las clnicas
para el cubano promedio se ven afectadas
de manera crnica por una escasez
de medicamentos y equipos. Muchos cubanos
se ven forzados a recurrir al mercado negro
para alimentar a sus familias. Hay largas
filas para necesidades bsicas que
evocan las colas de pan del siglo pasado
en la Unin Sovitica. Al
mismo tiempo, el rgimen ofrece tiendas
bien surtidas a los turistas extranjeros,
diplomticos y empresarios en la
versin comunista del apartheid.
Los gobernantes de Cuba prometieron libertad
de prensa. En cambio, clausuraron peridicos
y estaciones de radio y televisin
privados. Encarcelaron y propinaron palizas
a periodistas, registraron sus hogares,
confiscaron su papel, tinta y mquinas
de fax. Un periodista cubano les pidi
una cosa a periodistas extranjeros que lo
visitaron: una pluma. Otros usan betn
como tinta para la cinta de la mquina
de escribir.
Los gobernantes de Cuba prometieron ''respeto
absoluto por los derechos humanos''. En
cambio, ofrecieron a los cubanos prisiones
plagadas de ratas y un Estado polica.
Cientos de personas cumplen largas condenas
de prisin por ofensas polticas
como el delito de ''peligrosidad'', segn
lo define el rgimen. Otros han sido
encarcelados por el delito de ''sedicin
pacfica'', lo cual significa cualquier
cosa que decidan las autoridades cubanas.
Nos acompaan aqu familiares
de presos polticos en Cuba. Les
he pedido que vengan porque deseo que nuestros
conciudadanos vean los rostros de aquellos
que sufren como resultado de los abusos
de derechos humanos en la isla, a slo
unas 90 millas de nuestra costa. Uno de
ellos es Olga Alonso. Su hermano, Ricardo
Gonzlez Alfonso, ha sido hostigado
por las autoridades cubanas desde que tena
11 aos, porque escribi cosas
que a las autoridades cubanas no les gustaron.
En el 2003, Ricardo fue arrestado por sus
escritos y condenado a 20 aos de
prisin. Las autoridades confiscaron
contrabando ilegal que encontraron en su
casa. Este inclua cosas como una
computadora porttil, libretas y
una impresora. Olga, nos complace que est
aqu. Gracias por asistir. (Aplausos.)
Marlenis Gonzlez y su hija, Melissa,
estn presentes. Llegaron recientemente
de Cuba, pero sin el padre de Melissa. Jorge
Luis Gonzlez Tanquero se atrevi
a defender los derechos humanos de sus conciudadanos.
Por ello, fue arrestado por delitos contra
el Estado. Ahora languidece, en mal estado
de salud, dentro de una prisin cubana.
Bienvenidos. (Aplausos).
Damaris Garca y su ta,
Mirta Pernet, nos acompaan hoy.
Damaris describe al gobierno cubano como
''una mquina asesina''. Esas son
sus palabras. Han visto el encarcelamiento
de parientes por apoyar la libertad. Un
familiar muy querido, Omar Pernet Hernndez,
era un pobre hombre que venda golosinas
en las calles de La Habana. Por defender
la libertad, est cumpliendo una
condena de 25 aos. Tiene 62 aos,
est muy demacrado. Sin embargo,
sigue siendo un decidido defensor de los
derechos humanos a favor del pueblo cubano.
Bienvenidos. (Aplausos).
Tambin est con nosotros
Yamile Llanes Labrada. El esposo de Yamile,
Jorge [sic] Luis Garca Paneque,
era cirujano y periodista. Fue condenado
a 24 aos de prisin por atreverse
a decir la verdad sobre el rgimen.
Yamile misma fue acusada de espionaje y
tema por la seguridad de sus cuatro
hijos. Tras el arresto de Jos, una
turba organizada por las autoridades del
gobierno rode su casa. La turba
llevaba palos y amenaz con prenderle
fuego a la casa con la familia dentro. Este
ao, Yamile y sus hijos lograron
salir de la isla. No saben cundo
volvern a ver a su padre. Bienvenidos,
Yamile. (Aplausos).
Quiero darle las gracias a cada uno de
ustedes [por] venir hoy. Les agradezco por
permitirme compartir sus historias y les
agradezco por su valenta. Le pido
a Dios que vele por ustedes y sus seres
queridos. Que Dios los bendiga a ustedes
y a sus familias. Y me uno a sus oraciones
para que llegue el da en que la
luz de la libertad brille sobre Cuba.
Estos son apenas algunos de los ejemplos
del terrorismo y trauma que constituyen
la Cuba actual. El paraso socialista
es un gulag tropical. La bsqueda
de la justicia que alguna vez inspir
al pueblo cubano ahora se ha convertido
en un intento de aferrarse al poder. Y como
en todos los sistemas totalitarios, no hay
duda de que en el rgimen de Cuba
existen otros horrores an desconocidos
para el resto del mundo. Una vez que sean
desvelados, causarn conmocin
en la conciencia de la humanidad. Y sern
la vergenza de los defensores del
rgimen y todas las democracias que
se mantuvieron en silencio. (Aplausos).
Un ex prisionero poltico cubano,
Armando Valladares, lo expres de
esta manera: Llegar el momento en
que ''la humanidad sentir la repulsin
que sinti cuando salieron a la luz
los crmenes de Stalin''. Y ese da
est por llegar.
En estos momentos, aumentan los llamados
a realizar cambios fundamentales en toda
la isla. Se propagan las demostraciones
pacficas. Este ao los principales
disidentes cubanos se congregaron por primera
vez para emitir ''Unidad por la Libertad'',
una declaracin a favor del cambio
democrtico. Oyen los estertores
agonizantes de un rgimen fracasado.
Saben que incluso las pesadillas ms
crueles de la historia no pueden durar para
siempre. Un pueblo impaciente que anhela
reincorporarse al mundo por fin tiene esperanza.
Y en Cuba habr una verdadera revolucin.
una revolucin de libertad, democracia
y justicia. (Aplausos).
Este es el momento de apoyar a los movimientos
democrticos que se estn
propagando por la isla. Este es el momento
de respaldar al pueblo cubano que se pone
de pie por su libertad. Este es el momento
de que el mundo ponga de lado sus diferencias
y se prepare para la transicin de
Cuba a un futuro de libertad y progreso
y oportunidades. Los disidentes de hoy sern
los lderes [cubanos] del maana.
y, finalmente, cuando llegue la libertad,
sin duda recordarn quines
estuvieron de su lado. (Aplausos.)
La Repblica Checa y Hungra
y Polonia han sido fuentes vitales de apoyo
y aliento para la valiente oposicin
de Cuba. Les pido a otros pases
que hagan lo mismo. Todos los pases
pueden hacer esfuerzos tangibles para manifestarles
pblicamente su apoyo a quienes estn
en la isla y aman la libertad. Pueden abrir
sus embajadas en La Habana a los lderes
a favor de la democracia e invitarlos a
diversos eventos. Pueden usar la antecmara
de sus embajadas para darles a los cubanos
al Internet y libros y revistas.
Pueden animar a las organizaciones no gubernamentales
de sus pases para que establezcan
lazos de comunicacin directos con
la sociedad civil independiente de Cuba.
Aqu en nuestro pas tambin
podemos hacer ms. El Congreso de
Estados Unidos recientemente vot
a favor de fondos adicionales para apoyar
los esfuerzos democrticos en Cuba.
Les agradezco a todos por su buena labor
con respecto a esta medida. y los insto
a que remitan el proyecto de ley a mi despacho
lo antes posible. (Aplausos.) Tambin
insto a nuestro Congreso a que muestre nuestro
apoyo y solidaridad a favor de cambios fundamentales
en Cuba manteniendo nuestro embargo contra
la dictadura hasta que haya un cambio. (Aplausos).
El rgimen de Cuba usa el embargo
de Estados Unidos como chivo expiatorio
para las miserias de Cuba. Sin embargo,
desde hace mucho tiempo, presidentes
de nuestros dos partidos polticos
entienden que la fuente del sufrimiento
de Cuba no es el embargo, sino el sistema
comunista. Saben que el comercio con el
gobierno cubano no ayuda al pueblo cubano
si no se dan cambios importantes en el sistema
poltico y econmico de Cuba.
Ms bien, el comercio con Cuba simplemente
enriquece a las lites en el poder
y afianza su control. Mientras el rgimen
mantenga el monopolio de la vida poltica
y econmica del pueblo cubano, Estados
Unidos mantendr en vigor el embargo.
(Aplausos).
Estados Unidos sabe cunto est
sufriendo el pueblo cubano. y no nos hemos
quedado de manos cruzadas. En el transcurso
de los aos, hemos otorgado asilo
a los cientos de miles que han huido de
la represin y miseria impuesta por
el rgimen. Hemos alentado a los
pases para que sean abanderados
de la causa de la libertad en Cuba. Y continuaremos
hacindolo. Hemos autorizado a ciudadanos
y organizaciones privadas para que proporcionen
alimentos y medicamentos y otra ayuda. por
un monto de ms de $270 millones
tan slo el ao pasado. El
pueblo estadounidense, el pueblo de este
generoso pas, es la principal fuente
mundial de ayuda humanitaria para el pueblo
cubano. (Aplausos).
La ayuda que proporcionamos va directamente
a manos del pueblo cubano, en vez de los
cofres de los lderes cubanos. Y
se es el propsito de nuestra
poltica: acabar con el control absoluto
que tiene el rgimen de los recursos
materiales que el pueblo cubano necesita
para vivir y para prosperar y para tener
esperanza.
En estos momentos, para fomentar este esfuerzo,
Estados Unidos est listo para tomar
nuevas medidas para ayudar al pueblo cubano
directamente, pero slo si el rgimen
cubano, la clase gobernante, no pone obstculos.
Por ejemplo --he aqu una idea para
ayudar al pueblo cubano--, el gobierno de
Estados Unidos est listo para permitir
que organizaciones no gubernamentales y
grupos religiosos proporcionen computadoras
y al internet al pueblo cubano. Si
los gobernantes de Cuba acaban con las restricciones
para el a la internet que les imponen
a todos.
O Estados Unidos est listo para
invitar a jvenes cubanos de familias
oprimidas a participar en programas de becas
de la Alianza a favor de la Juventud Latinoamericana
(Partnership for Latin American Youth),
para ayudarlos a tener equitativo
a mayores oportunidades educativas. Si los
gobernantes cubanos permiten que participen
libremente.
Le hacemos estos ofrecimientos al pueblo
cubano. y esperamos que sus gobernantes
permitan que los acepten. Saben?
Hemos hecho ofertas similares antes. pero
fueron rechazadas sin ms por el
rgimen. Es una triste leccin
y debe ser una leccin clara para
todos: Para la clase gobernante de Cuba,
aferrarse al poder es ms importante
que el bienestar de su pueblo.
La vida no mejorar para los cubanos
bajo el actual sistema de gobierno. No mejorar
si hay un cambio de un dictador por otro.
No mejorar si buscamos acomodarnos
a una nueva tirana en nombre de
la ''estabilidad''. (Aplausos.) Estados
Unidos no participar en darle oxgeno
a un rgimen criminal cuya vctima
es su propio pueblo. No respaldaremos el
antiguo sistema con nuevas caras, el antiguo
sistema sujetado por nuevas cadenas. La
palabra clave para nuestras relaciones futuras
con Cuba no es ''estabilidad''. La palabra
clave es ''libertad''. (Aplausos.)
Siguiendo esa lnea, hoy tambin
estoy anunciando un nuevo programa para
establecer un fondo internacional multimillonario,
el Fondo de Libertad para Cuba. Este fondo
ayudar al pueblo cubano a reconstruir
su economa y hacer la transicin
a la democracia. Les he pedido a dos
de mi gabinete que encabecen el esfuerzo:
la secretaria Rice y el secretario Gutirrez.
Van a solicitar que gobiernos de diferentes
pases y organizaciones internacionales
contribuyan a esta iniciativa.
Y el fondo funcionar de la siguiente
manera: El gobierno cubano debe demostrar
que ha adoptado, de palabra y accin,
las libertades fundamentales. Estas incluyen
la libertad de expresin, la libertad
de asociacin, la libertad de prensa,
la libertad de formar partidos polticos
y la libertad de cambiar el gobierno mediante
elecciones multipartidarias peridicas.
Y una vez que estas libertades estn
en vigor, el fondo podr darles a
los cubanos, especialmente a los empresarios
cubanos, a subvenciones y prstamos
y condonacin de deuda para ayudarlos
a reconstruir su pas. (Aplausos).
La restauracin de estas libertades
bsicas es la base de elecciones
libres y competitivas. Sin esa proteccin
fundamental en vigor, las elecciones son
slo ejercicios cnicos que
les dan a las dictaduras la legitimidad
que no merecen.
Sabremos que hay una nueva Cuba cuando
los partidos de oposicin tengan
la libertad para organizarse, reunirse y
hablar con igual a las comunicaciones.
Sabremos que hay una nueva Cuba cuando una
prensa libre e independiente sea capaz de
operar sin censura. Sabremos que hay una
nueva Cuba cuando el gobierno deje de suprimir
la actividad econmica privada.
Y por encima de todo, sabremos que hay
una nueva Cuba cuando las autoridades vayan
a las crceles, entren en las celdas
donde hay personas encarceladas por sus
convicciones, y las pongan en libertad.
(Aplausos). Ser un momento en que
las familias aqu presentes se puedan
reunir con sus seres queridos, y cuando
los nombres de los liberados incluyan. cuando
disidentes como Oscar Elas Biscet,
Normando Hernndez Gonzlez
y Omar Rodrguez Saludes sean puestos
en libertad. (Aplausos). Ser un
momento en que los cubanos de conciencia
sern liberados de sus grilletes;
no como un gesto o estratagema, sino porque
el gobierno ya no quiere encarcelar a las
personas por sus ideas, por lo que dicen
o por lo que creen.
La transicin de Cuba de una sociedad
en ruinas a un pas libre quiz
sea larga y difcil. Las cosas no
siempre salen como se espera. Habr
ajustes difciles que hacer. Una
de las maldiciones del totalitarismo es
que afecta a todos. Gente buena compromete
sus convicciones morales para alimentar
a su familia, evitar la curiosidad de los
vecinos y salvarse de una visita de la polica
secreta. Si Cuba ha de entrar a una nueva
era, debe encontrar la manera de reconciliarse
y perdonar a quienes han sido parte del
sistema pero no se mancharon las manos de
sangre. Ellos tambin son vctimas.
En este momento, mis palabras estn
siendo transmitidas a Cuba en vivo por los
medios en el mundo libre, entre ellos Radio
y TV Mart. A ustedes los cubanos
que me escuchan, corriendo quiz
graves riesgos, quisiera hablarles directamente.
Algunos de ustedes son del ejrcito
cubano o la polica o funcionarios
del gobierno. Tal vez en algn momento
creyeron en la revolucin. Ahora
pueden ver su fracaso. Cuando los cubanos
se levanten para exigir su libertad, ellos.
Para exigir la libertad que merecen, ustedes
deben tomar una decisin. Defendern
un orden desacreditado y moribundo usando
la fuerza contra su propia gente? O
aceptarn con los brazos abiertos
el cambio que desea su pueblo? Hay lugar
para ustedes en una Cuba libre. Pueden compartir
la esperanza que encuentran en la cancin
que se ha convertido en el grito que une
a los cubanos dentro y fuera de la isla
que aman la libertad: ''Nuestro da
ya viene llegando''. (Aplausos).
A los ciudadanos cubanos que me escuchan:
tienen el poder de forjar su propio destino.
Pueden hacer realidad un futuro donde sus
lderes respondan ante ustedes, donde
ustedes puedan expresar libremente sus convicciones
y donde sus hijos puedan crecer en paz.
Hubo un tiempo en que muchos expertos dijeron
que ese da nunca llegara
a Europa Oriental o Espaa o Chile.
Pero esos expertos estaban equivocados.
Cuando el Santo Padre fue a Cuba y ofreci
las bendiciones divinas, les record
que ustedes tienen el futuro de su pas
en sus manos. Y pueden repetir estos versos
en su corazn: Su da viene
llegando. (Aplausos.)
A los estudiantes en Cuba: tienen mucho
en comn con la gente joven de Estados
Unidos. Ustedes tambin suean
con un futuro lleno de esperanza, ustedes
tambin tienen el optimismo para
hacer realidad esos sueos. No creen
en las mentiras trilladas que les cuentan
de Estados Unidos. No queremos nada de ustedes;
slo darles la esperanza y la alegra
de la libertad. No tengan miedo del futuro.
Su da viene llegando. (Aplausos.)
Hasta que ese da llegue, ustedes
y su sufrimiento siempre estarn
en nuestro corazn, los recordaremos
en nuestras oraciones. Y hasta que no podamos
estar lado al lado como hombres y mujeres
libres, los dejo con una esperanza, un sueo
y una misin: Viva Cuba libre. (Aplausos.)
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