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Mayo 6, 2002 6412x El comunismo patas arriba Víctor Manuel Domínguez, Lux InfoPress LA HABANA, mayo (cubanet.sergipeconectado.com) - La última locura del escritor uruguayo Eduardo Galeano -según sus propias palabras- es el libro "El mundo patas arriba". Y aunque no lejos de la verdad, el autor de "Memorias del fuego", "Las venas abiertas de América Latina" y el "Libro de los abrazos" no vislumbró en sus agoreras predicciones el final del sistema que él propone como alternativa al caos reinante en el universo: el comunismo. Considerado como "un perfecto idiota latinoamericano y miembro de honor de la izquierda caviar", "El mundo..." es una obra-manual que sirve como torniquete a la hemorrágica visión del escritor, y posponiendo sus sueños de irse a meditar al Himalaya, realiza una labor de pitoniso rojo que omite información para complacer a sus siniestros congéneres consultantes. A través de unas viñetas aparecidas en un periódico cubano (Juventud Rebelde) que sirve de traspatio a los desechos de su digestión intelectual de izquierda (proporcionada por alimentos obtenidos en la derecha), el autor arremete contra todos los conceptos y formas de vida que se aparten del paraíso de los desposeídos y que integran Cuba, China, Corea del Norte y otros gobiernos totalitarios de cualquier denominación, convertidos por obra y gracia de la pluma de Eduardo en paradigmas del bienestar y la libertad para todos. Haciendo gala de su libertad de viajar y de expresar lo que desee sin ninguna restricción, el autor recopila e informa desde su dossier de viajero incansable algunas de las expresiones que considera incongruentes con la realidad. En una de las viñetas titulada "Pórticos", el caperucito rojo que lucha contra el lobo neoliberal y otros males de la globalización desmontó un cartel lleno de ironía encontrado en el pórtico de Auschwitz: "El trabajo libera". En otras de sus deyecciones políticas, denominada "Carteles", el eminente Galeano cazó un aforismo colocado en las paredes del ministerio de Educación de Chile durante la campaña de alfabetización: Analfabeto: ¡Aprende a leer!
No hay dudas de que al señor Galeano le asiste toda la razón y el derecho al desprecio por estas manipulaciones del lenguaje, pero, ¿desconoce que en los erradicados campos de concentración cubanos, conocidos como UMAP se leían y escuchaban similares palabras a las encontradas en Auschwitz? ¿No sabe que un pueblo alfabetizado como el cubano, al que se le dijo: lee, y no: cree, se le prohibe leer lo que le venga en ganas? Al parecer Eduardo Galeano aún no tiene conocimiento de las purgas de Stalin, de las matanzas de Katin y Tiennamen, de las hambrunas de Ucrania y Corea del Norte, del primer récord Guinnes del hombre nuevo cubano al llegar a España en el tren de aterrizaje de un avión, o de los miles de habitantes del Edén comunista que arremeten contra embajadas o se suben a cualquier cosa que flote para escapar del Paraíso e irse a vivir al Infierno capitalista. ¿Será por masoquismo? No hay dudas, el sub-comandante Marcos de las letras, el "Tiro Fijo" de frac y jipi japa debe partir al Himalaya a recuperar la información perdida al sur de una garganta que, como la suya, sólo puede cantar a los de abajo desde lo alto. LUX INFO-PRESS CubaNet no reclama exclusividad de sus colaboradores y autoriza la reproducción de este material informativo, siempre que se le reconozca como fuente. |
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