MADRID, España.- La noche de este miércoles 21 de mayo volvió a ser escenario de indignación popular en Cuba. Esta vez, la mecha se encendió en el oriente del país, donde vecinos de varias zonas de Santiago de Cuba y Bayamo salieron a las calles para protestar contra los apagones interminables y la aguda escasez de alimentos que asfixia a la población.
En el barrio Micro 9, del distrito José Martí en Santiago de Cuba, decenas de personas se congregaron en plena oscuridad para exigir “corriente y comida”. Los gritos, captados en videos difundidos por el periodista independiente Yosmany Mayeta, dan cuenta del creciente malestar ciudadano. “Llegan patrullas a Micro 9, donde hay madres, niños y vecinos reunidos protestando a esta hora”, escribió el reportero en sus redes sociales.
Algunos de los videos publicados por Mayeta muestran calles completamente a oscuras, interrumpidas solo por las voces de los manifestantes: “¡Súbelo Mayeta! ¡Corriente y comida!”. Los reclamos, nacidos en medio de la desesperación, reflejan el colapso de los servicios básicos y el hartazgo generalizado de la población.
La protesta no se limitó a Micro 9. De acuerdo con el periodista, también se reportaron manifestaciones en San Feliz y Santa Isabel, ubicados en el reparto Los Maceos, en pleno centro de Santiago. En la madrugada del jueves, testigos presenciaron un despliegue de fuerzas represivas, incluyendo boinas negras y agentes vestidos de civil, en diferentes puntos de la ciudad.
Simultáneamente, en Bayamo, capital de la provincia de Granma, otro grupo de cubanos salió a protestar en el reparto Jabaquito, específicamente en la intersección de Jabaquito y la 20, en Siboney, según confirmó el periodista José Raúl Gallego. Patrullas policiales acudieron a la zona para dispersar a los manifestantes.
Como ya es habitual en estos contextos, el régimen reaccionó con un corte de a internet y el despliegue de propaganda en redes sociales, intentando proyectar una imagen de calma en Bayamo. “El régimen ha activado el ciber ejército para publicar fotos de Bayamo mostrando tranquilidad, una estrategia recurrente cuando intentan ocultar protestas”, denunció Gallego.
Mayeta resumió lo ocurrido en una frase cargada de simbolismo: “Esta es una noche tensa para los comunistas, porque los santiagueros y los bayameses han demostrado que la chispa sigue encendida”.
Horas antes de que estallaran las protestas en el oriente del país, autoridades del régimen comparecieron en la televisión nacional para intentar justificar la crisis energética. En una edición especial de la Mesa Redonda, reconocieron que el sistema electroenergético nacional atraviesa una situación “grave” y anunciaron supuestas mejoras en los apagones para los próximos meses, junto a medidas para s de gas licuado. Pero mientras ofrecían promesas, miles de cubanos seguían a oscuras.
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