Apagones: ¿Cómo se las ingenian algunos cubanos para conectarse a internet? 45701b
Los cubanos han tenido que recurrir nuevamente a la inventiva para poder mantenerse conectados a las redes de datos móviles durante los largos apagones. 5n6fc
Los cubanos han tenido que recurrir nuevamente a la inventiva para poder mantenerse conectados a las redes de datos móviles durante los largos apagones. 5n6fc
Casi una década después de la “Revolución Eenergética” de Fidel Castro, en Cuba estamos peor: con largos apagones y sin qué ni cómo cocinar.
La tragedia de San Antonio del Sur e Imías, el abandono que sufrieron sus habitantes, quienes debieron enfrentar solos y desinformados la catástrofe, es otro capítulo más del extenso historial de negligencias del régimen.
A unos 10 días del apagón total que afectó a la Isla, otra vez los apagones afectan a diario a alrededor del 35% del país.
“Los cubanos tienen hambre, es doloroso verlo”, dijo a la prensa una turista canadiense que vivió el apagón total en la Isla.
Esa manifestación nutrida y poderosa que cabía esperar de la ciudad más poblada de Cuba, jamás ocurrió, porque en La Habana, como en el resto de la Isla, hay miedo.
“Se está viendo si es necesario también la ayuda de combustible [a Cuba], como ayuda humanitaria”, dijo Claudia Sheinbaum.
El régimen prorroga la suspensión de clases y actividades laborales que ha sido efectiva desde el pasado viernes.
Aquí ya todos hemos olvidado qué cosa es “tranquilidad”. La hemos sustituido por tantos miedos, sobresaltos y resignaciones que ya no sabemos qué cosa es vivir tranquilos.
Los cubanos sobreviven después de tres días de colapso energético mientras el régimen amenaza con reprimir cualquier atisbo de protesta.
Los cubanos han tenido que recurrir nuevamente a la inventiva para poder mantenerse conectados a las redes de datos móviles durante los largos apagones.
Casi una década después de la “Revolución Eenergética” de Fidel Castro, en Cuba estamos peor: con largos apagones y sin qué ni cómo cocinar.
La tragedia de San Antonio del Sur e Imías, el abandono que sufrieron sus habitantes, quienes debieron enfrentar solos y desinformados la catástrofe, es otro capítulo más del extenso historial de negligencias del régimen.
A unos 10 días del apagón total que afectó a la Isla, otra vez los apagones afectan a diario a alrededor del 35% del país.
“Los cubanos tienen hambre, es doloroso verlo”, dijo a la prensa una turista canadiense que vivió el apagón total en la Isla.
Esa manifestación nutrida y poderosa que cabía esperar de la ciudad más poblada de Cuba, jamás ocurrió, porque en La Habana, como en el resto de la Isla, hay miedo.
“Se está viendo si es necesario también la ayuda de combustible [a Cuba], como ayuda humanitaria”, dijo Claudia Sheinbaum.
El régimen prorroga la suspensión de clases y actividades laborales que ha sido efectiva desde el pasado viernes.
Aquí ya todos hemos olvidado qué cosa es “tranquilidad”. La hemos sustituido por tantos miedos, sobresaltos y resignaciones que ya no sabemos qué cosa es vivir tranquilos.
Los cubanos sobreviven después de tres días de colapso energético mientras el régimen amenaza con reprimir cualquier atisbo de protesta.